jueves, 7 de noviembre de 2013

Situación límite en la contratación a través de ETT en QUALYTEL-ARVATO

Situación límite en la contratación a través de ETT en QUALYTEL-ARVATO


Desde CGT llevamos años denunciando las condiciones laborales precarias y prácticas que bordean el fraude de la ley, también en el caso de empleados que atienden otros números de atención públicos, como el del Ministerio de Justicia o el 112 de Andalucía.



 La compañía, filial del grupo Arvato Bertelsmann, tiene varios centros de trabajo repartidos en diferentes ciudades de España. Ha sido el comité de empresa de Qualytel en Zaragoza, que cuenta con 1.270 trabajadores y trabaja íntegramente para Vodafone, el último que ha denunciado el despido de dos trabajadoras que notificaron su embarazo a la empresa. La empresa les comunicó a través de una ETT que daba por finalizado sus contratos temporales, a pesar de que cientos de trabajadores siguen realizando sus mismas tareas.

 La empresa Qualytel-Arvato recurre a las empresas de trabajo temporal Adecco, Unique y Crit   Interim, y desde hace años mantiene a  personas trabajando con contratos que renueva de 15 en 15 días, viven un periodo de prueba constante. No tienen derecho a ponerse malos ni a tener un hijo, todo eso supone que la empresa no les haga un nuevo contrato, igual le ocurre a la gente que está de baja, o en caso de matrimonio, una vez finalizado su contrato, no se lo renuevan hasta que concluya su permiso matrimonial.  Desde CGT llevamos denunciando esta situación que nos encontramos en todas las plataformas, aunque en muchos casos, las trabajadoras prefieren no denunciar: con contratos precarios tienen poca indemnización que ganar y mucho miedo a que la empresa prescinda de ellas.

  Además, la alta tasa de temporalidad, como ejemplo, solo el 15% de la plantilla de Zaragoza es indefinida y algo más del 30% está contratada a través de empresas de trabajo temporal, aunque ese porcentaje ha llegado a ser en ocasiones de hasta el 50%. El Comité de Zaragoza ha acudido en varias ocasiones a la inspección de trabajo. "Son miles de contratos que hay que investigar. Cambian su modus operandi de contratación, hay una rotación brutal, todas las semanas se va gente y entra gente nueva".  Por desgracia, este trato es un mal cada día más generalizado en el convenio de telemarketing.