martes, 8 de marzo de 2016

CARTAS AL DIRECTOR Ante el 8 de marzo

CARTAS AL DIRECTOR

Ante el 8 de marzo

  Me enfada que me feliciten el 8 de marzo. Ser mujer no es nada especial como para que me tengan que felicitar. No somos un colectivo con características y atributos comunes por los que nos tengan que felicitar. 

  Solo somos el 51% de la población. Distintas, diversas. El 8 de marzo es una fecha para reivindicar la igualdad de las mujeres en el mundo, y gritar lo obvio: que somos personas, ciudadanas de plenos derechos, autónomas, libres. El 8 de marzo es una jornada mundial de lucha, de reivindicación, de evaluación. Es una fecha para recordar todo lo que hemos caminado juntas y todo lo que nos queda por recorrer hacia la plena igualdad. Así que no me feliciten por ser amorosa, bondadosa, trabajadora o luchadora. O por ser obediente, buena madre y mejor amante. 

  Deberíamos evitar la frivolización de esta fecha. Que no se regalen flores ni bombones. La mejor forma de sumarse al 8 de marzo es defendiendo los derechos humanos, acudiendo a las manifestaciones, cuestionando cómo se sostiene nuestra vida cotidiana. Visibilizando las desigualdades. 

  El 8 de marzo no se felicita, se reivindica. Así que el 8 de marzo, a la calle.

Cristina Hernández Martín.
http://elpais.com/elpais/2016/03/05/opinion/1457201801_824249.html