Diez cosas que hay que saber sobre el
virus del Ébola
Una de las enfermeras que atendió al misionero Manuel García Viejo fallecido de ébola el pasado 26 de septiembre, ha dado positivo este lunes y se convierte en el primer caso contraído fuera de África.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) cifra en 3.338 el número de fallecimientos por el brote de ébola en África Occidental. La agencia de la ONU eleva a 7.178 el total de contagios.
A continuación te contamos lo que deberías saber sobre el virus del Ébola según la OMS:
1. ¿Cuándo apareció por primera vez y de dónde procede su nombre?
La primera vez que apareció fue en 1976, registrándose de forma simultánea dos brotes, uno en Nzara, en Sudán, y otro en Yambuku, entonces Zaire y actualmente República Democrática del Congo (RDC). Este último brote se produjo en una localidad muy cercana al río Ébola, de donde tomó el nombre la enfermedad. Existen cinco cepas de este filovirus, por su forma de hilo, entre ellas la Zaire, responsable del actual brote.
2. ¿Sabías que la tasa de mortalidad puede ser de hasta el 90%?
Desde que se detectó por primera vez ha habido una veintena de brotes y de casos aislados de la enfermedad el virus del Ébola, a la que antiguamente se conocía como fiebre hemorrágica del ébola. En algunos de estos brotes, la tasa de mortalidad ha llegado a ser del 90% de las personas contagiadas, principalmente en función de la virulencia de la cepa.
La tasa de mortalidad del actual brote de ébola en los países de África Occidental es del 51%, lo que va desde el 41% de Sierra Leona al 66% de Guinea.
3. ¿De dónde procede el virus?
En realidad el ébola es un virus que está presente en animales y que los humanos contraen al entrar en contacto con la sangre, las secreciones u otros fluidos de animales infectados. Se ha podido constatar que en África el murciélago de la fruta es un portador natural del virus y que su distribución geográfica coincide en buena medida con la de los brotes registrados.
4. ¿Cómo se contagia entre humanos?
El contagio entre humanos solo puede producirse mediante el contacto directo a través de cortes o heridas en la piel o mediante las membranas mucosas con la sangre, las secreciones, los órganos u otros fluidos corporales con personas que han sido infectadas. Por regla general, el contacto se suele producir al cuidado a una persona que ya está enferma con el virus, de ahí el que se den también bastantes casos entre personal sanitario.
5. ¿Sabías que el virus puede permanecer activo en el semen hasta siete semanas?
Según datos de la OMS, los hombres que se han recuperado de la enfermedad todavía pueden transmitirla a través de su semen hasta siete semanas después de su recuperación. De hecho, se ha llegado a aislar el virus del Ébola en un hombre 61 días después del inicio de la enfermedad tras ser infectado en un laboratorio.
6. ¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas iniciales son fiebre, debilidad intensa, dolores musculares, dolor de cabeza y garganta irritada. A continuación se producen vómitos, diarrea, sarpullidos, problemas renales, y en algunos casos, hemorragias internas y externas. Los análisis en el laboratorio han detectado leucocitos y plaquetas bajas en la sangre.
7. ¿Cuál es el periodo de incubación?
El periodo de incubación del Ébola desde que se entra en contacto con el virus hasta que aparecen los primeros síntomas es de dos a 21 días. Dado que los síntomas son parecidos a los de otras enfermedades como la malaria o el cólera entre otros, la mejor manera de constatar que se está ante la enfermedad es mediante análisis de laboratorio.
8. ¿Cómo prevenir la enfermedad y cuál es el tratamiento a seguir?
Lamentablemente no existe una vacuna en el mercado contra el virus del ébola, si bien hay varias que están siendo probadas, aún en fase experimental. Tampoco existe un tratamiento específico para combatir los efectos de la enfermedad, más allá de suministrar hidratación oral con soluciones con electrolitos o fluidos intravenosos a las personas contagiadas, así como atención paliativa.
9. ¿Cómo evitar su propagación?
La mejor manera de evitar que este virus tan mortífero se propague es la concienciación de la población sobre los riesgos de la enfermedad y sobre las medidas de protección e higiénicas que hay que adoptar, principalmente ser más constantes en el lavado de las manos. Así, se recomienda tocar siempre con guantes a animales, sobre todo si se les manipula, y cocinar bien su carne.
A nivel de las personas, hay que evitar el contacto físico cercano con los enfermos y en el caso del personal sanitario deberán atenderles usando siempre guantes, gafas y otra ropa de protección. Además, es muy importante enseñar a las comunidades los principales síntomas como el fin de que se pueda identificar con rapidez los casos.
El personal de laboratorio que realiza los análisis también debe extremar las medidas de precaución, ya que existe un alto riesgo de contagio, al igual que las personas encargadas de los entierros.
10. ¿Cuáles han sido los brotes más mortíferos?
Desde 1976 hasta la fecha ha habido más de una veintena de brotes y de casos aislados, principalmente de la cepa Zaire. Hasta la fecha, la epidemia más mortal fue la primera en 1976 en la República Democrática del Congo, donde hubo 318 casos y 280 muertos, con una tasa de mortalidad del 88%.
En el año 2000 hubo una epidemia en Uganda, en este caso de la cepa Sudán, con 424 casos y 224 fallecidos. El último brote de la enfermedad se había registrado en 2012 en RDC con 57 casos y 29 muertos, si bien se trató de la variante Bundibugyo del virus.