El salario se congela en los convenios de empresa firmados este año
La reforma laboral de 2012 cambió las reglas de juego en la negociación colectiva, al facilitar que las relaciones laborales se pacten en el ámbito empresarial. También, dio más poder a las compañías para forzar que el ajuste, en tiempos de crisis, se hiciese en otros conceptos (salarios, jornada), más allá de los habituales despidos. Desde entonces, es en la negociación de convenios de empresa donde las revisiones salariales son más limitadas. Y, según los datos distribuidos ayer por Empleo, los pactos firmados en este ámbito en lo que va de año apuntan a una congelación salarial.
En los 173 convenios de empresa firmados hasta mayo, que afectan a 62.250 trabajadores, la variación salarial acordada es apenas del 0,08%. Si el foco se abre para recoger lo pactado para este año en convenios multianuales, ya sea en el ámbito empresarial o en ámbitos superiores (sectoriales, provinciales, etc.), el aumento en vigor para los 3,5 millones de asalariados afectados ronda el 0,5%, un nivel muy similar al de 2013.
La negociación colectiva está bastante más adelantada que el año pasado, cuando las diferencias entre patronal, sindicatos y Gobierno sobre la caducidad de los convenios colectivos ralentizaron el proceso. Pero los indicios de recuperación en el mercado de trabajo, con los primeros aumentos anuales en la afiliación a la Seguridad Social, no se dejan notar aún en los sueldos. Las escasas perspectivas de inflación, con un índice de precios de consumo que apenas se levantará del 0% este año, facilitan la persistencia de la congelación salarial.
La estadística de convenios permiten un acercamiento imperfecto a la evolución de los sueldos. Solo da información del incremento teórico para los asalariados. Además, el colectivo cubierto no deja de menguar. Y la reforma laboral abrió la puerta al descuelgue de convenio, una medida que afecta ya a casi 250.000 trabajadores y cuyo objetivo básico es rebajar sueldos, aunque Empleo no suministra información todavía sobre la magnitud de esa revisión salarial a la baja.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ofreció otros datos que corroboran la atonía salarial: el coste laboral por hora efectiva trabajada aumentó un 0,5% en el primer trimestre respecto al mismo periodo del año anterior. Pero este dato también tiene sus matices porque, como apuntó el Banco de España en febrero, estos promedios no tienen en cuenta cuál es la composición del empleo en cada momento (el trabajo temporal suele está peor remunerado que el estable).
Sindicatos y patronal firmaron un pacto de rentas, que incluía una recomendación para limitar las subidas salariales al 0,6% en el trienio 2012-2014. Dirigentes de UGT y CC OO ya han advertido que un nuevo acuerdo debería incorporar aumentos superiores a la inflación para que los trabajadores recuperen poder adquisitivo.
Fuente: elpais.com
