Si no te pagan la nómina, podrías quedarte con la empresa
Manclús, Mol-Matric, Cartonajes Aitana, Alfombras Sherlimp, Gramagraf,
Metalva… Son nombres de empresas que tienen algo en común: se trata de pymes
españolas que se han ido a la quiebra en crisis anteriores, que han sido
recuperadas en cooperativa por sus trabajadores, que funcionan y que resisten a
las crisis después de muchos años, remando los altibajos de la macroeconomía.
Solo en estas seis empresas que nombré se han salvado y mantenido más de 150
empleos.
El calificativo de las “empresas recuperadas” ha ganado
fama mundial de la mano de las empresas argentinas, que han hecho mucho ruido.
Han creado sus propias y fuertes organizaciones e incluso han formado parte del
propio Gobierno, a través de un espacio en el Instituto Movilizador de Fondos
Cooperativos (INAES). Hace unos diez años, la famosa periodista canadiense
Naomi Klein se interesó por ellas, filmó el documental La Toma,
el tema traspasó fronteras y el mundo entero supo de su
existencia.
En España no se escucha casi hablar de empresas en
quiebra recuperadas. Una de las razones de este desconocimiento es la dificultad
para darles visibilidad: es muy difícil recabar información a gran escala de
estas empresas porque la misma no está centralizada. Y no está centralizada
porque los propios obreros no suelen ser conscientes de la importancia de sus
esfuerzos, no tienen casi apoyos más allá del movimiento cooperativo, y cuando
lo logran no se autodenominan “empresa recuperada” sino simplemente –y a veces
en voz baja–, cooperativa.
Y sin embargo, no sólo
existen, sino que tienen muchos años de funcionamiento (unas cuantas llevan
desde los años setenta). Su trayectoria demuestra que el traspaso se puede hacer
bien, que es posible, rentable y sostenible en el tiempo. Son el ejemplo vivo de
que sí hay alternativas.Sólo en Cataluña las empresas recuperadas
hace treinta años tienen detrás un fuerte componente político, que hoy forma
parte del movimiento cooperativista catalán. Tal vez por eso sea de allí el
único cineasta, Joaquim Jordá, que habló de ello en los documentales “Numax
Presenta” y en “20 años no es nada” (aunque la experiencia que muestra no es muy
exitosa).Las empresas recuperadas que han tenido éxito están en
todo el territorio español.
Apenas hace falta elegir unas cuantas cooperativas
al azar y preguntar por los inicios de su andadura para que se vea que realmente
existen. Habría que tomarse el trabajo de ir entrevistando una por una (hay unas
18.000 cooperativas en España) y hasta ahora nadie lo ha hecho. La Confederación
de Cooperativas de Trabajo Asociado (COCETA) lo ha intentado pero con pocos
recursos, y haría falta bastante más.
Autora: Mariana Vilnitzky
http://alternativaseconomicas.coop/posts/aqui-hay-trabajo-si-no-te-pagan-las-nominas-podrias-quedarte-con-la-empresa