viernes, 17 de enero de 2014

El personal de atención al público no dispone de la tecnología necesaria para satisfacer a los clientes

El personal de atención al público 
no dispone de la tecnología necesaria 
para satisfacer a los clientes

El deterioro en la atención al cliente es una cuestión de la que se ha hablado mucho, pero este hecho es especialmente alarmante cuando los trabajadores intentan por todos los medios complacer a los consumidores y, aun así, no lo consiguen. 


Esta situación afecta aproximadamente a 9 de cada 10 (89%) trabajadores en áreas de atención al cliente, como por ejemplo, empleados y directivos de bancos, operadores de call center, enfermeras y encargados de tiendas. Todos ellos afirman, en un nuevo Informe de Pensamiento Líder encargado por RICOH y dirigido por la consultora independiente Forrester Consulting, que no disponen de los medios suficientes para poder ofrecer una óptima atención al cliente, lo que se traduce en una alarmante pérdida de capacidad de generar ingresos.

 
“Hemos detectado que las deficiencias en el servicio de atención al cliente habitualmente se deben a carencias en los flujos de información de la compañía”, afirma Eduard Farga, Director de Marketing y Desarrollo de Negocio de RICOH España. “En algunos casos, los empleados que trabajan de cara al público no pueden satisfacer las expectativas de los consumidores por no disponer de fácil acceso a la información necesaria en el momento adecuado, lo que les impide prestar una atención al cliente de calidad. Por esta razón, quisimos analizar esta realidad y, así, poder ayudar a las compañías a definir y mejorar sus estrategias de servicio al cliente”.


 
El estudio pone de manifiesto que los trabajadores en áreas de atención al cliente, que constituyen más de la mitad de los empleados de las organizaciones, son clave para las compañías que luchan por salir de la recesión. Lamentablemente, los problemas derivados de la mala gestión de los procesos documentales restan tiempo que se podría emplear en personalizar la experiencia del cliente; un fracaso que lleva consigo un significativo coste de oportunidad para las organizaciones.



De hecho, casi uno de cada cuatro directivos (23%) afirma que una gestión deficiente de los servicios documentales ha frenado la efectividad de sus trabajadores en las áreas de atención al cliente de sus organizaciones. Por otra parte, un 26% de los directivos han coincidido en que el acceso limitado a la información representa un obstáculo importante para todos aquellos puestos situados de cara al público.



Según el informe, las compañías que invierten en herramientas de colaboración, mensajería instantánea, soluciones móviles y flexibilidad en el lugar de trabajo, poseen trabajadores en áreas de atención al cliente mucho más eficientes y, además, les proporcionan más tiempo para que puedan ofrecer el servicio personalizado que precisa el consumidor. Esto se consigue siempre y cuando las compañías inviertan en los procesos documentales y los sistemas necesarios para conseguir maximizar los beneficios que la tecnología puede aportar.


Pero en la actualidad, una gran parte de los empleados aún invierten mucho tiempo en tareas rutinarias como la entrada de datos. Además, tienen dificultades para poder llevar a cabo un gran número de actividades, ya sea la búsqueda rápida de información, la creación de documentos, la edición, redacción y procesamiento de la información, así como la solución de puntuales situaciones complejas o el uso de soluciones móviles. “Como resultado de ello, no están comprometidos de forma activa con sus clientes,” concluye el informe. “Con el apoyo a estos empleados, a través de la mejora de soportes y procesos documentales, las organizaciones alcanzarán una fuerte posición competitiva y lograrán incrementar sus ingresos”.


El motivo de la brecha



La principal causa de esta situación reside en la tecnología que utilizan los trabajadores de cara al público, que además de obsoleta, generalmente suele ser inferior a la utilizada por sus propios clientes.



Mientras que más de un tercio de los directivos (36%) sostiene que sus compañías se esfuerzan por contar con la tecnología más innovadora, alrededor del 27% afirma que existe una brecha creciente entre el uso de la tecnología por parte de los clientes y la infraestructura tecnológica con la que cuentan los trabajadores de las áreas de atención al cliente. No resulta sorprendente, pues, que el acceso a la información se resienta de ello.


La investigación, detallada en el estudio llamado ‘La nueva realidad en el trabajo: Las empresas deben captar el ritmo y el alma de los trabajadores emergentes’, está basada en una encuesta online llevada a cabo por Forrester a 250 responsables de estrategias y operaciones globales de atención al cliente, así como a colaboradores individuales de esta misma área, entre marzo y mayo de 2013.